El 1 de enero de 2022 entró en vigor la reforma sobre la Ley General para la defensa de los consumidores y usuarios que supuso un importante cambio en las condiciones de garantía de los productos. Estas modificaciones suponen la ampliación del plazo de la garantía legal pasando de dos a tres años en cualquier producto que compremos desde esa fecha. En el caso de los servicios y contenidos digitales tendrán dos años de garantía.
En el caso de los productos de segunda mano la garantía nunca será menor a un año.
Cuando un producto se averíe estando en garantía, el consumidor tendrá derecho a la reparación o sustitución del mismo, a no ser que estas medidas supongan un coste desproporcionado para el empresario.
Durante los dos primeros años, el empresario se responsabilizará del funcionamiento del producto, contenido o servicio digital. El periodo en el que se asume que el daño detectado se debe a un problema de fabricación; mal funcionamiento o defecto en el producto, no contaría como tiempo transcurrido de garantía. Es importante tener en cuenta que un producto entregado tras su reparación, tiene a su vez, un año de garantía, independientemente del tiempo que quedase de garantía al producto original.
Después de dos años, es al consumidor al que le corresponde demostrar que es un defecto de origen y no debido al mal uso, si solicita la reparación gratuita.
Las medidas que tome el empresario para sustituir o reparar el producto serán gratuitas para el consumidor o usuario, tanto la mano de obra como las piezas de sustitución, materiales, piezas de repuesto, gastos de envío o transporte.
El plazo de 3 años de garantía se aplica a aquellos productos de naturaleza duradera como electrodomésticos, vehículos, muebles, aparatos electrónicos, entre otros.
Este plazo de garantía no es aplicable a productos fungibles; alimentos, plantas o productos de consumo rápido.
Para solicitar la Garantía es imprescindible la presentación del ticket o factura de compra. Si el empresario se lo solicitara en el momento de la reparación, hay que entregar siempre una copia y quedarse con el original.
La garantía se ejecutará si se dan las siguientes circunstancias:
- Si el producto tiene un efecto que lo hace inservible.
- Si no sirve para el uso al que está destinado.
- Si tiene prestaciones distintas a las anunciadas
- Si el manual de instrucciones es erróneo y ocasiona un defecto en el producto al montarlo o instalarlo
- En el caso de que la instalación esté incluida en el contrato; si los técnicos enviados por el empresario instalan incorrectamente el producto.
Cambios y reparaciones
Se amplia de 5 a 10 años el plazo en el que el empresario debe garantizar la existencia de piezas para la reparación de un producto, a contar desde la fecha que deje de fabricarse.
Como consumidor tiene derecho a reclamar esta reparación o sustitución del artículo al empresario o al productor, en su caso.
En las compras entre particulares no se aplican estos derechos sobre las garantías. Existe, eso sí, un plazo de seis meses en el que el vendedor responde ante el comprador sobre posibles defectos ocultos del artículo.
La reforma legislativa busca reforzar el consumo sostenible, aumentar la durabilidad, fomentar la economía circular y reducir el consumismo excesivo favoreciendo las reparaciones y la reutilización de los productos consumidos.